“Esta acción amedrenta a un funcionario venezolano y de seguro habrá desde acá un documento en rechazo a esa medida”, ha manifestado este domingo Saab durante una entrevista concedida a la agencia venezolana de noticias Telesur.
Esta acción amedrenta a un funcionario venezolano y de seguro habrá desde acá un documento en rechazo a esa medida”, ha afirmado el defensor del pueblo venezolano, Tarek William Saab.
El defensor del pueblo venezolano también ha considerado esta alerta migratoria, emitida por la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol, por sus siglas en inglés) e impuesta por EE.UU., como una nueva agresión del país norteamericano que tiene como propósito frenar sus actividades como un político.
“Estados Unidos ha tomado un papel de policía mundial para juzgar a naciones y acusarlas de mil patrañas”, ha añadido Saab para luego recalcar que el Ministerio de Asuntos Exteriores de Venezuela también ha rechazado esta acción que es otro intento estadounidense para amedrentar a la nación venezolana.
Además, ha agregado que quiere aprovechar la 12° Conferencia de los Institutos Nacionales de Derechos Humanos para las Naciones Unidas, a celebrarse el próximo lunes en México para mostrar su repudio a “esta situación que ataca y agrede a un activista de derechos humanos de Venezuela”.
El funcionario venezolano ha informado de que tuvo comunicaciones con el embajador del país ante el organismo mundial, Rafael Ramírez, a fin de que expresara su rechazo y protesta en la ONU.
Tarek William Saab, denunció el sábado una agresión migratoria en su contra por parte de Estados Unidos cuando él se encontraba en México. Al arribo del funcionario venezolano, las autoridades mexicanas le notificaron la existencia de una alerta migratoria de nivel 1.
En este sentido, el defensor de la nación venezolana anteriormente durante una entrevista con HispanTV había considerado a EE.UU. como el principal impulsor de una campaña internacional para hacer ver a Venezuela como un territorio donde se violan los derechos humanos.
Las tensiones entre EE.UU. y Venezuela se intensificaron después de que el presidente estadounidense, Barack Obama, aprobara en marzo de 2015 otro paquete de sanciones contra Venezuela por presuntamente respaldar la violación de derechos humanos durante las protestas, según Caracas, “de carácter golpista” registradas entre el 12 de febrero y 30 mayo de 2014 en el país suramericano. Además, declaró a Venezuela como una “amenaza inusual y extraordinaria para la seguridad de Estados Unidos”.
Sin embargo, las autoridades venezolanas al rechazar tales acusaciones y condenar las medidas de Washington en su contra, han reiterado su intención de normalizar las relaciones venezolano-estadounidenses sobre la base de “dignidad del Gobierno y el pueblo venezolanos”, tal como expresó la jefa de la Diplomacia venezolana, Delcy Rodríguez.
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