Nicolás Maduro tomó posesión del cargo de presidente para el mandato 2019-2025 y la oposición contestó como pudo, con un acto de apenas algunos cientos en el este de Caracas.
El nuevo referente opositor insistió en que las Fuerzas Armadas deben facilitar un gobierno de transición y se apoyan para esto en la presión internacional.
Pero en este plano la diplomacia venezolana se anotó un triunfo: casi todos los países del Grupo de Lima se retractaron por haber afirmado en un documento donde se tomaba partido por Guyana en el conflicto de límites entre los dos países.
El canciller de Venezuela, Jorge Arreaza, pidió además a la República Federativa de Guyana que vuelva a la mesa de negociación en el marco de las Naciones Unidas para avanzar en la resolución del centenario conflicto limítrofe.
Para el Gobierno de Nicolás Maduro, esta retractación masiva le quita fuerza al Grupo de Lima y su presión sobre las instituciones venezolanas.
Marcos Salgado, Caracas.
akm/hnb
