Maduro un día antes de asumir su nuevo mandato, amenazó de tomar medidas enérgicas y diplomáticas contra los países firmantes de la declaración del Grupo de Lima si no rectifican su postura injerencista contra el país bolivariano.
El mandatario venezolano le da un ultimátum de 48 horas al Grupo de Lima para que renuncien a sus hostiles acciones intervencionistas.
Maduro, rechazó las aventuras golpistas de Washington. Denunció que la Casa Blanca y el Grupo de Lima intentan derrocar a su Gobierno legítimo, por el simple hecho de no doblegarse ante su yugo neoliberal e imperialista.
Asimismo, precisó que su Gobierno ha entregado una nota de protesta a los 14 países del Grupo de Lima, quienes desconocen la reelección de Maduro en los comicios del 20 de mayo de 2018.
Pese a las presiones de Washington y sus aliados ultraderechistas contra Venezuela, llegan las delegaciones de varios países regionales e internacionales para su investidura.
Maduro que ha liderado el país desde 2013, fue reelegido en las presidenciales de 2018. No obstante, el denominado Grupo de Lima sostiene que las urnas no fueron democráticas, y no reconocerá la legitimidad de un nuevo mandato de Maduro.
El pasado viernes, con respaldo de EE.UU., el grupo pidió a Maduro abstenerse de tomar posesión. El mandatario latinoamericano siempre ha defendido la legitimidad de su proceso, recordando que fue elegido vía democrática a través del voto del pueblo.
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