Serguéi Lavrov llegó a Ankara, capital de Turquía, donde se reunió con su homólogo, Mevlut Cavusoglu, para abordar asuntos de interés común.
En una rueda de prensa conjunta, Lavrov recordó este viernes que Moscú ha declarado en varias ocasiones que no rechaza los diálogos de paz en Ucrania, pero estos pueden tener lugar solo si se basan en un nuevo orden mundial, libre de la dominación de Estados Unidos.
Al denunciar que el objetivo de Occidente es eliminar a Rusia porque intenta llevar a cabo una política exterior independiente, Lavrov advirtió que Moscú podría eludir el histórico acuerdo de exportación de grano ucranianos del mar Negro, negociado por las Naciones Unidas, si los aliados de Kiev siguen obstaculizando a las exportaciones de grano y fertilizantes rusos.
La parte turca compartió el mismo punto de vista con Rusia y afirmó que estos problemas deben solucionarse lo antes posible para extender dicho pacto y garantizar la seguridad alimentaria a nivel internacional.
En teoría, los productos esenciales para la agricultura mundial no pueden ser objeto de las sanciones occidentales a Moscú por el conflicto en Ucrania pero, en la práctica, estas exportaciones siguen enfrentándose a una serie de obstáculos que incluyen el bloqueo de pagos bancarios.
xsh/tqi