El dolor de cabeza para las autoridades francesas no es solo el malestar social que se vive en las calles o una convulsa campaña presidencial.
Los franceses no olvidan el masivo programa de espionaje de Estados Unidos que alcanzó las más altas esferas gubernamentales así como la construcción de un centro de intervención y de escucha telefónica en el techo de la embajada de Estados Unidos en pleno corazón de parís (capital gala).
El senador francés, miembro de la Comisión de Defensa, Yves Pozzo di Borgo, recuerda lo sucedido así como el espionaje a las campañas presidenciales.
Justamente hace unas semanas el sitio WikiLeaks reveló que los candidatos franceses de la elección presidencial de 2012, entre ellos el actual presidente de Francia, François Hollande, habían sido espiados por la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos (CIA, por sus iniciales en inglés).
Para este 2017, Francia no solo tendrá que lidiar con el espionaje, también están los ataques cibernéticos.
Pero la amenaza puede seguir también con las elecciones legislativas en donde se elegirán a 577 diputados. El voto legislativo será electrónico.
Hacer frente al espionaje de países aliados así como ataques cibernéticos, será el mayor desafío para la autoridades francesas en las elecciones presidenciales del próximo 23 de abril.
Miguel Martínez, París.
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