El canciller iraní, Seyed Abás Araqchi, quien asistió a la 17.ª cumbre de BRICS en Río de Janeiro (Brasil), ha expresado este lunes la gratitud de Irán por “la enérgica e inequívoca condena” del bloque de los países emergentes contra la reciente agresión militar israelí-estadounidense contra el país persa.
“El influyente grupo de países coincide, sin lugar a dudas, en que los ataques deliberados contra la infraestructura civil y las instalaciones nucleares iraníes bajo las salvaguardias de la (Agencia Internacional de Energía Atómica) AIEA violan tanto el derecho como las normas internacionales”, ha valorado Araqchi en un mensaje en su cuenta de X.
Según Araqchi, en la cumbre del BRICS en Río de Janeiro, donde se reunieron representantes de estados que representan el 40 % del PIB mundial y casi la mitad de la población mundial, se han hecho más evidentes que nunca los profundos cambios económicos y políticos que nuestro planeta está presenciando.
“Irán celebra y se complace en formar parte del inicio de una nueva era”, ha reiterado.
Iran is grateful for the strong and unequivocal condemnation by BRICS of the recent Israeli and US military aggression. In no uncertain terms, the deliberate attacks on Iranian civilian infrastructure and nuclear sites under IAEA safeguards violate both international law and… pic.twitter.com/xJTcJYw2hw
— Seyed Abbas Araghchi (@araghchi) July 7, 2025
Durante su intervención en la cumbre de los BRICS, Araqchi advirtió el domingo que las consecuencias de las agresiones de Estados Unidos y el régimen de Israel “no se limitarán a un solo país (Irán)”, sino “toda la región, y más allá, sufrirá”.
“Pero más que eso, todo el sistema de derecho internacional basado en las Naciones Unidas está siendo socavado y apartado en favor de la violación de leyes y el unilateralismo malicioso”, agregó.
El 13 de junio, el régimen de Israel inició una agresión contra Irán, so pretexto de destruir por completo el programa nuclear pacífico iraní. La agresión israelí que tuvo como objetivos centros militares, instalaciones nucleares y zonas residenciales en Teherán (la capital) y muchas otras ciudades iraníes
Más de una semana después de la agresión, Estados Unidos, por orden del presidente Donald Trump, también se unió a Israel y bombardeó tres instalaciones nucleares iraníes en Fordo, Natanz e Isfahán, en una grave violación de la Carta de las Naciones Unidas, el derecho internacional y el Tratado de No Proliferación (TNP) nuclear.
Tras 12 días de agresión israelí, la aplastante respuesta de las Fuerzas Armadas iraníes con el lanzamiento de cientos de misiles y drones obligó al régimen de Tel Aviv a detener su agresión y declarar un alto el fuego.
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