El embajador y representante permanente de Irán ante la Organización de Naciones Unidas (ONU) en Nueva York, Amir Said Iravani, condenó categóricamente el viernes las amenazas explícitas hechas por el presidente estadounidense, Donald Trump, y el ministro israelí de asuntos militares, Israel Katz, contra el ayatolá Seyed Ali Jamenei.
En una provocadora publicación en su red social Truth Social, el magnate republicano aseguró el 18 de junio que Estados Unidos tiene ubicado al Líder iraní, a quien describió como un “objetivo fácil”, aunque aclaró que por el momento no ordenaría su eliminación. El viernes, Trump repitió sus descaradas palabras, afirmando que “salvó” al ayatolá Jamenei de la muerte durante el reciente conflicto entre Irán e Israel.
En cartas remitidas al secretario general de la ONU, António Guterres, y a la presidenta pro-témpore del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU), Caroline Rodriguez-Birkett, el embajador persa consideró estas amenazas como una violación flagrante de la Carta de la ONU.
“Tales amenazas deliberadas e imprudentes por parte de altos funcionarios constituyen una grave violación de la Carta de las Naciones Unidas, especialmente del Artículo 2, párrafo 4, el cual prohíbe explíctamente la amenaza o el uso de la fuerza contra la integridad territorial o la independencia política de cualquier Estado”, se lee en las misivas.
Estas amenazas —agregó Iravani— “también violan los principios reconocidos del derecho internacional, incluido el principio de inmunidad de los jefes de Estado, y constituyen un claro ejemplo de incitación al terrorismo de Estado”.
Advirtió que “tales amenazas, al intentar normalizar el asesinato como una herramienta de política exterior, sientan un peligroso precedente y reflejan un desprecio evidente por el orden jurídico internacional”, por tanto, instó a la comunidad internacional a “no guardar silencio ante violaciones tan flagrantes y crecientes del derecho internacional”.
El diplomático se reservó el derecho de Irán a la legítima defensa según el Artículo 51 de la Carta y solicitó a la ONU y el CSNU que condenen en los términos más enérgicos las amenazas de asesinato hechas por EE.UU. e Israel contra el Líder iraní y consideren tales declaraciones como “ilegales, irresponsables y terroristas”.
Asimismo, llamó a recordar “la obligación jurídica de todas las partes de abstenerse de incitar o apoyar actos terroristas o atentados contra funcionarios de otros Estados y adopten las medidas necesarias para responsabilizar a los autores de estos actos ilícitos internacionales, en el marco de la Carta de la ONU y de los instrumentos internacionales pertinentes en la lucha contra el terrorismo y la responsabilidad internacional de los Estados”.
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