La guerra blanda y oculta del enemigo tiene como objetivo “alejar a la nación de la Yihad (guerra santa) y de la resistencia, haciendo que ignore los valores (de la República Islámica) y dominando su mente”, ha subrayado el ayatolá Seyed Ali Jamenei.
El Líder iraní hizo estas declaraciones el pasado 26 de septiembre en el Congreso de Mártires de las provincias de Kohkiluye y Buyer Ahmad (suroeste) y de Jorasán del Norte (noreste). Pero el discurso ha sido emitido este domingo en el recinto Mosala de Imam Jomeini de Yasuj, capital de Kohkiluye y Buyer Ahmad.
La Defensa Sagrada fue una guerra mundial contra el Islam y su dominio. Un conflicto que aunque fue impulsado por el baasista Saddam (Husein, el ejecutado dictador iraquí), era apoyado por un frente amplio internacional”, ha lamentado el Líder de la Revolución Islámica, el ayatolá Seyed Ali Jamenei.
“La nación iraní, gracias a su resistencia, frustró la mayoría de objetivos de las potencias mundiales y (ahora) los expansionistas recurren a todo tipo de medios, incluidas amplias campañas publicitarias y presiones económicas, políticas y de seguridad, para desanimar a la nación” y alejarla del escenario político del país, advierte.
El ayatolá Jamenei explica que el enemigo intenta mostrar la guerra impuesta por el antiguo régimen baasista de Irak contra la República Islámica de Irán (1980-88), como si fuera cualquier otro conflicto armado en el mundo y ocultar de esta manera los principales ideales de los mártires iraníes; es decir, el Islam, el gobierno islámico, y el Islam revolucionario, entre otros.
“La Defensa Sagrada fue una guerra mundial contra el Islam y su dominio. Un conflicto que aunque fue impulsado por el baasista Saddam (Husein, el ejecutado dictador iraquí), era apoyado por un frente amplio” internacional, ha lamentado el Líder.
El ayatolá Jamenei en reiteradas ocasiones ha advertido de los planes enemigos para infiltrarse en el país y alterar el Sistema de la República Islámica.
Para el Líder conocer a los enemigos es uno de los requisitos fundamentales de la era actual, ya que hoy en día actúan a través de conspiraciones mediáticas y propagandísticas. También, pide a toda la nación iraní a estar “preparada ante la magnitud de la hostilidad de los enemigos para enfrentar y contrarrestar (sus complots) en el campo de la guerra blanda, que apunta la cultura, las esferas políticas y sociales”.
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