• El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, pronuncia un discurso en una ceremonia oficial en Ankara, la capital de Turquía, 22 de enero de 2018.
Publicada: lunes, 22 de enero de 2018 22:54
Actualizada: lunes, 22 de enero de 2018 23:54

El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha asegurado que su país ‘no dará marcha atrás’ en la operación militar contra los aliados kurdos de Estados Unidos en la región siria de Afrin, reprochando así el reclamo de Washington para que Ankara precise una fecha del fin de su ofensiva en Siria.

“La cuestión de Afrin será solucionada, no habrá marcha atrás en Afrin”, ha aseverado este lunes Erdogan, además de resaltar que Ankara no necesita permiso para realizar esta operación militar y que la continuará hasta cuando “se alcancen todos los objetivos”.

Estas declaraciones se producen después de que el secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson, en una llamada telefónica solicitara el domingo al canciller turco, Mevlut Cavusoglu, que la ofensiva militar en la región de Afrin sea “limitada en alcance y duración”.

El mandatario turco, no obstante, ha cuestionado la llamada de Washington y ha recordado la invasión militar de EE.UU. en otros países de la región, como Afganistán e Irak, en los años de 2001 y 2003, respectivamente.

“Yo pregunto a Estados Unidos ¿acaso habéis dado una duración específica (de vuestra presencia) en Afganistán? ¿Acaso habéis dado una fecha sobre cuándo acabará?", ha dicho Erdogan para luego señalar que, en el caso de Irak, el despliegue estadounidense tuvo lugar en 2003 y “todavía siguen ahí”.

La cuestión de Afrin será solucionada, no habrá marcha atrás en (la región siria de) Afrin”, ha indicado el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan.

 

Turquía lo único que busca en esta ofensiva es acabar con lo que llama “el corredor terrorista” del norte de Siria, dice Erdogan y recalca que la operación en Afrin fue acordada con Rusia. “La hemos hablado con los rusos y hay consenso”, afirma.

El Ejército de Turquía inició el sábado una importante ofensiva en la región de Afrin, en el norte de Siria, multiplicando bombardeos aéreos y de artillería contra las Unidades de Protección Popular (YPG, por sus siglas en kurdo), una milicia kurda apoyada por Estados Unidos que Ankara pretende barrer de su frontera porque la considera, junto a otras milicias kurdas, una agrupación terrorista.

La llamada ‘Operación Rama de Olivo’ se produce después de que se haya revelado que los estadounidenses tratan de entrenar a un nuevo ejército compuesto por 30.000 milicianos kurdo-árabes en Siria, iniciativa que ha indignado a Ankara.

De cualquier manera, Siria ha rechazado “la flagrante agresión” de las fuerzas de Turquía contra su soberanía y ha llamado a la comunidad internacional a detener “de inmediato” estos recientes ataques turcos.

myd/ncl/mjs/hnb