Según informó el viernes la agencia iraquí de noticias Shafaq News citando las fuentes locales, miembros del grupo takfirí atacaron puntos pertenecientes al Ejército iraquí en las afueras del distrito de Al-Azim, al norte de la ciudad de Baquba, capital de la provincia de Diyala.
No obstante, las fuerzas iraquíes frustraron la ofensiva terrorista, y como consecuencia dos soldados resultaron heridos en los enfrentamientos.
Asimismo, fuentes cercanas a la Movilización Popular (Al-Hashad Al-Shabi, en árabe) afirmaron que la situación está bajo de control y los miembros de Daesh aprovecharon las desfavorables condiciones climáticas para realizar el ataque.
Montañas de Hamrin, escondites de las células durmientes de Daesh
Un experto en seguridad iraquí, Amir Abdul Monem, calificó a las montañas de Hamrin, ubicadas en la provincia de Diyala, como un escondrijo de Daesh, desde donde lanzan ataques contra blancos civiles y militares iraquíes en dicha gobernación.
“Los terroristas se esconden en estas alturas porque hay áreas de difícil acceso y hay cuevas en estas montañas donde los extremistas esconden armas y municiones”, explicó y para luego añadir que los terroristas solo tiene estas alturas para esconderse, y “no tienen otra ruta de escape”.
En Irak todavía hay presencia de los extremistas de Daesh en diferentes puntos del país, a pesar de que “en diciembre de 2017 el Gobierno iraquí dio por finalizada la guerra contra esta agrupación terrorista, tras recuperar el control de todos los territorios que esta banda había ocupado a mediados de 2014.
Ante tal coyuntura, el Ejército iraquí, con el apoyo de fuerzas populares, realiza operaciones a gran escala en diferentes partes del país para erradicar a los terroristas.
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