El tema de la necesidad de una nueva Asamblea Nacional Constituyente (ANC) ha sido recurrente en la última década en Honduras. Fue una idea rechazada durante el Gobierno del expresidente José Manuel Zelaya, pero hoy el Gobierno de Juan Orlando Hernández intenta impulsar su instalación.
La Mesa Nacional de los Derechos Humanos rechazó recientemente esta intención de los grupos de poder, por considerar que la nueva Carta Magna solo respondería a los corruptos que actualmente tienen el poder.
La actual Constitución de Honduras data de los años 80, pero ha tenido un sin número de modificaciones y reformas, además de violaciones constitucionales.
Una de las intenciones de los grupos de poder es convertir este actual Parlamento en Constituyente algo que es rechazado por la población y organismos nacionales, por considerar que estos diputados están implicados en actos de corrupción de la actual Administración.
El Parlamento hondureño retomó sus actividades, allí los diputados del Partido Libertad y Refundación (Libre) mostraron su negativa con las intenciones del partido de Gobierno, mostraron pancartas, pitos y consignas de lucha.
Dassaev Aguilar, Tegucigalpa.
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