El embajador de Ecuador en Londres, Jaime Alberto Marchán, ha negado que haya cambio de planes sobre la situación de Assange. Así, negó la información que reveló la propia Wikileaks, que apuntaba a la expulsión del australiano por revelar información sobre el presidente de Ecuador, Lenín Moreno.
El destino de Assange y las posibles decisiones sobre él no parecen claros aún, pero el círculo cercano al activista afirma también que es muy probable que Quito decida castigarlo por revelar información de presuntas actividades ilícitas del presidente Moreno y que Assange está preparado para lo que venga.
Ante este panorama, el relator especial de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para el derecho a la vida privada, Joe Cannataci, ha anunciado que viajará el 25 de abril a Londres para reunirse con Assange y darle apoyo.
El expresidente de Ecuador Rafael Correa, otorgó en 2012 el asilo a Assange, quien se había refugiado en la embajada ecuatoriana en Londres para evitar ser extraditado a Suecia, donde se lo reclamaba para enfrentar acusaciones, que no prosperaron, por presuntos delitos sexuales.
Assange sigue en la legación debido a que Londres se ha negado a entregarle un salvoconducto ya que mantiene una orden de detención en su contra.
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