Los vídeos publicados en las redes sociales muestran a un policía sujetando las manos del chico detrás de la espalda y al otro colocando su rodilla sobre el cuello del joven. Esto mientras que, se puede escuchar a la gente gritar: “eso no es gracioso” y “saque la rodilla”.
El incidente ocurrió alrededor de las 19:30 (hora local) del 15 de agosto en la ciudad alemana de Düsseldorf (este). Las autoridades afirmaron que cuatro agentes de policía involucrados están siendo investigados por presunta mala conducta.
Según la Policía, los oficiales fueron llamados al casco antiguo de la ciudad para atender a una multitud ruidosa cerca de un restaurante. Después de que el grupo fue arrestado, el joven involucrado que no estaba en el incidente, pero estaba presente en el lugar fue agredido por los agentes por interrumpir la operación. Se cree que el joven involucrado se resistió al arresto y lo llevaron a una comisaría para interrogarlo, pero luego fue puesto en libertad.
El hecho de Düsseldorf recuerda el arresto del afrodescendiente George Floyd, quien murió el pasado 25 de mayo en Mineápolis, en el estado de Minesota (EE.UU.) cuando un policía blanco lo inmovilizó contra el suelo clavándole una rodilla en el cuello por varios minutos, mientras el afroamericano suplicaba que lo dejasen respirar. La muerte de Floyd ha desatado masivas protestas contra el racismo y la brutalidad policial en todo el mundo, incluida Alemania.
También, el pasado lunes, se dio a conocer un vídeo grabado el 8 de agosto en la ciudad alemana de Mulheim an der Ruhr, donde se ve a un joven turco sometido por una violenta detención por parte de la Policía local. La madre del joven afirmó que los oficiales colocaron a su esposo y a uno de sus hijos en el suelo y pusieron sus rodillas sobre el cuello de su hijo cuando trataban de persuadirlos de no remolcar su automóvil debido al mal estacionamiento.
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