El portavoz del Ejército yemení, el teniente general Yahya Sari, ha informado este domingo en Twitter que la Fuerza Aérea ha apuntado con “alta precisión” a la mencionada base saudí, empleando un avión no tripulado (dron) Qasef-2K.
Sari ha resaltado que la ofensiva se produjo en el marco de “una respuesta legítima a la escalada de la agresión y el asedio total” impuestos por Arabia Saudí y sus aliados contra el pueblo yemení.
Al mismo tiempo, los medios del reino árabe, citando a un vocero de la coalición agresora saudí y sus mercenarios, han confirmado que los combatientes del movimiento popular yemení Ansarolá dispararon la madrugada del domingo un dron suicida hacia la provincia saudí de Asir (suroeste).
La llamada coalición ha alegado que la aeronave fue interceptada y destruida por la defensa aérea saudí sobre los cielos de Jamis Mushait, ciudad que alberga la base Rey Jalid.
Fue el 31 de mayo cuando las fuerzas yemeníes tomaron por blanco, con sus dones, por tercer día consecutivo, el mencionado aeródromo.
La ofensiva es parte de las operaciones de represalia de las fuerzas yemeníes contra los enemigos saudíes que iniciaron en marzo de 2015 una campaña de bombardeos y bloqueo contra Yemen, provocando la peor crisis humanitaria del siglo.
Según advirtió recientemente la Organización de las Naciones Unidas (ONU), debido a la agresión saudí, Yemen se ha vuelto un “infierno”.
Las autoridades yemeníes subrayan que no detendrán sus acometidas contra objetivos clave de los atacantes mientras la llamada coalición liderada por Riad no ponga fin a sus brutales operaciones.
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