“Son las potencias emergentes de este mundo con las cuales Venezuela ahora tiene relaciones profundas, estrechas, de confianza, de respeto”, destacó el presidente venezolano, Nicolás Maduro, al ofrecer un balance de su gira por Argelia y Kazajistán, en este último, asistió a la cumbre de la Organización para la Cooperación Islámica (OCI), según el canal Venezolana de Televisión (VTV).
En un discurso emitido el martes desde el Palacio de Miraflores (sede de Gobierno) en Caracas, Maduro vaticinó que “el mundo del imperio va a morir” y “desaparecerá de la historia de la humanidad y quedará como un triste y oscuro recuerdo”.
Por lo tanto, anunció que los 57 países de la OCI manifestaron su apoyo al Ejecutivo venezolano tras las sanciones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, contra el país suramericano.
Son las potencias emergentes de este mundo con las cuales Venezuela ahora tiene relaciones profundas, estrechas, de confianza, de respeto”, destacó el presidente venezolano, Nicolás Maduro.
Aquí en Venezuela, prosiguió Maduro, está definida una política internacional y soberana; la política internacional donde Venezuela era el patio trasero del imperio estadounidense quedó atrás, jamás volverá la política internacional donde le rendíamos pleitesía a las cortes europeas, afirmó.
El jefe bolivariano de Estado adelantó que Venezuela se afiliará a la OCI en calidad de observador: “Venezuela va ingresar a la Organización para la Cooperación Islámica de 57 países de los más poderosos del mundo, de los más emergentes del siglo XXI”.
Maduro viajó a Argelia en busca de precios justos para el petróleo pese a los embargos estadounidenses que han afectado ese mercado. Previamente, había participado el 10 de septiembre en la cumbre de la OCI sobre Ciencia y Tecnología en Kazajistán, donde expresó a sus homólogos que se debe abogar por “un mundo sin guerra, sin imperio hegemónico”.
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