Publicada: sábado, 25 de mayo de 2013 5:02
Actualizada: sábado, 3 de diciembre de 2016 9:14

El régimen de Israel, el principal aliado de Estados Unidos, proporcionó helicópteros y armas que fueron usados en el genocidio de Guatemala en la década de 1980, convirtiéndose así en cómplice del asesinato de indígenas mayas-ixiles durante la administración del exdictador guatemalteco Efraín Ríos Montt.

La información fue revelada por el exoficial de Inteligencia israelí Ari Ben-Menashe, que en una entrevista concedida al diario 'Consortium News' reveló que el régimen de Tel Aviv proporcionó ayuda militar en el escalofriante y brutal crimen que llevó a cabo el Ejército del país centroamericano, según ha informado RT este sábado.

La noticia ha visto la luz después de que nuevas pruebas confirmaran la complicidad del entonces presidente de Estados Unidos, Ronald Reagan, en la mencionada matanza.

El exagente israelí sostuvo, además, que sus “amigos estadounidenses” pidieron a su país ayuda militar para Guatemala, demanda que fue escuchada.

Asimismo, precisó que el régimen israelí suministró seis helicópteros y ordenadores, con capacidad de realizar un seguimiento de presuntos indígenas subversivos para luego identificarlos y ejecutarlos. Igualmente, aseguró que las autoridades israelíes eran conscientes de las genocidas campañas militares en Guatemala en contra de los indígenas mayas-ixiles, y que él mismo dio parte de estos masivos asesinatos.

En este sentido, en opinión del analista Sandino Asturias, tanto el régimen de Tel Aviv como Washington dieron su beneplácito a la masacre, y a las políticas atroces y brutales ejecutadas en esta época en Guatemala.

“En el caso particular de (el régimen de) Israel había una relación de asesoría permanente en temas de inteligencia”, reiteró Asturias. Al informar de que el armamento guatemalteco actual es “fundamentalmente armamento israelí”, el experto insistió en que “(el régimen de) Israel se fue convirtiendo en el sustituto de EE. UU. en proveer de armas al Ejército de Guatemala”.

El exdictador guatemalteco Ríos Montt fue condenado el pasado 10 de mayo a 80 años de prisión: 50 años por genocidio y 30 por crímenes de lesa humanidad; al ser considerado autor intelectual del asesinato de 1771 indígenas mayas-ixiles a manos del Ejército, en el departamento de Quiché (norte), durante su Gobierno de facto entre 1982 y 1983.

No obstante, la sentencia, dictaminada por un tribunal de justicia guatemalteco contra Ríos Montt fue anulada el pasado lunes por la Corte de Constitucionalidad (CC) de Guatemala, que ordenó la repetición del juicio.

La CC abolió el dictamen bajo el argumento de que el Tribunal Primero A de Mayor Riesgo no resolvió una recusación planteada en contra de dos miembros de esa judicatura por el abogado Francis García Gudiel, defensor de Ríos Montt.

De acuerdo con los datos proporcionados por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el genocidio acaecido durante el régimen de Ríos Montt fue uno de los más cruentos de la guerra civil que vivió Guatemala durante 1960-1996, que dejó un saldo de 200 000 muertos y desaparecidos.

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