En un comunicado emitido por la ONG, se asegura que integrantes de la alianza terrorista Yeish al-Fatah, de la cual forma parte el Frente Al-Nusra, lanzaron fuego de artillería y disparos de proyectiles de mortero y cohetes contra el barrio del Sheij Maqsud, en la ciudad siria de Alepo (noroeste), causando la muerte a al menos 83 civiles —de los que 30 eran menores— y heridas a 700 entre febrero y abril.
"Los implacables ataques a Sheij Maqsud ha destruido vidas de civiles. Una amplia variedad de grupos armados de Yeish al-Fatah ha lanzado lo que parecen ser ofensivas indiscriminadas que podrían constituir crímenes de guerra", ha lamentado la subdirectora interina de AI para el Oriente Medio y Norte de África, Magdalena Mughrabi.
Los implacables ataques a Sheij Maqsud ha destruido vidas de civiles. Una amplia variedad de grupos armados de Yeish al-Fatah ha lanzado lo que parecen ser ofensivas indiscriminadas que podrían constituir crímenes de guerra", ha lamentado la subdirectora interina de AI para el Oriente Medio y Norte de África, Magdalena Mughrabi.
Mughrabi ha afirmado además que los bombardeos terroristas contra el barrio residencial del Sheij Maqsud suponen una violación flagrante del principio de distinción entre objetivos civiles y militares, un punto cardinal del derecho humanitario.
Syria: Armed opposition groups committing war crimes in Sheikh Maqsoud, Aleppo city https://t.co/wuMGNWlMr6 pic.twitter.com/vDhdiEJxJR
— AmnestyInternational (@AmnestyOnline) May 13, 2016
También ha resaltado que dos de los grupos armados que están participando en estos ataques, los denominados Ahrar al-Sham y Yaish al-Islam, han enviado a representantes a las conversaciones de paz de Ginebra, mediadas por Naciones Unidas.
Asimismo, ha advertido del deterioro de la situación humanitaria, recalcando que el mencionado barrio alepino "se encuentra al borde de una crisis".
En abril, el Ejército sirio y la Fuerza Aeroespacial de Rusia comenzaron operaciones conjuntas para liberar Alepo, cuya completa recuperación representaría un golpe decisivo a los grupos armados que operan en Siria.
El presidente sirio, Bashar al-Asad, ha enfatizado en un mensaje emitido a su homólogo ruso, Vladimir Putin, que las fuerzas del país no aceptarán nada que no sea la victoria frente a los terroristas en la estratégica ciudad de Alepo.
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