“Nada indica que Putin haya renunciado a su objetivo de controlar Ucrania [...] No debemos subestimar a Rusia. Se prepara para una guerra larga”, advirtió el viernes el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg.
En declaraciones a la agencia francesa de noticias AFP, Stoltenberg precisó que, no obstante, la Alianza Atlántica seguirá suministrando armas a Ucrania hasta que el mandatario ruso entienda que “no puede ganar en el campo de batalla”.
Al mismo tiempo, puso énfasis en que Putin está listo “para lanzar nuevas ofensivas” en el territorio ucraniano, “vemos que moviliza más fuerzas, está dispuesto a sufrir muchas pérdidas y trata de acceder a más armas y municiones”, alegó.
Tal como pronosticó el jefe del bloque militar, lo más probable es que esta guerra termine mediante el diálogo. Sin embargo, subrayó, para garantizar la soberanía de Ucrania, resulta imprescindible ofrecer apoyos militares a Kiev a fin de que “Putin comprenda que no puede ganar en el campo de batalla”.
A este mismo respecto, Stoltenberg declaró que “está en curso una discusión” para el suministro de sistemas Patriot a Ucrania, y a la vez, los miembros de la OTAN tienen como objetivo aumentar la producción de armas para reconstruir sus propias reservas y brindar apoyo armamentista a Ucrania a largo plazo.
Europa experimenta la crisis más peligrosa desde Segunda Guerra Mundial
Al mismo tiempo, Stoltenberg precisó que, pese a que las amenazas nucleares de Putin se redujeron últimamente, la OTAN sigue alerta “y vigilará constantemente lo que hacen”, pues los europeos están experimentando una situación “peligrosa”.
“Es la crisis de seguridad más peligrosa que hemos conocido en Europa desde la Segunda Guerra Mundial”, dijo para luego calificar de “imprudente” la retórica nuclear de Moscú. “Su objetivo es, por supuesto, disuadirnos de apoyar a Ucrania, pero no lo logrará”, puntualizó.
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