75 años después, los polacos rememoran la cálida bienvenida que recibieron en Irán durante la Segunda Guerra Mundial, mediante una exposición original de fotografías de aquellos refugiados.
La colección incluye 1200 negativos fotográficos que se descubrieron recientemente en un antiguo estudio fotográfico situado en Isfahán. Estas fotos se permiten vislumbrar los años que pasaron en Irán.
Después del ataque de la Alemania nazi y la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) a Polonia, en 1939, Moscú inició un programa de deportaciones masivas de polacos. En 1942, cerca de 120 mil refugiados polacos que llegaban de los campos de trabajo en Siberia, encontraron refugio seguro en suelo iraní durante la Segunda Guerra Mundial; lo que se conoce como la mayor migración europea a Irán, por lo que Teherán (capital) alberga el cementerio polaco más grande del país.
Estas fotografías son un homenaje desde el corazón a una nación que siempre ha sido un defensor de la paz. Esta galería está abierta hasta el 20 de octubre para ofrecer la oportunidad de conocer la historia de los polacos que vinieron a Irán.
Mohamad Husein Maddi, Teherán.
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