“Ahora existe un entendimiento real de que las lesiones psicológicas tienen consecuencias profundas y que su tratamiento es necesario y eficaz”, afirmó la subdirectora del Ministerio de Defensa israelí, Limor Luria, en referencia a los más de 11 000 militares afectados por problemas de salud mental desde el inicio de la agresión de Israel contra la Franja de Gaza, según informó el diario británico The Independent.
Desde el comienzo de la guerra en Gaza, se ha registrado un aumento significativo de casos de ansiedad postraumática, depresión y otros trastornos graves que afectan tanto a soldados en servicio activo como a reservistas.
De acuerdo con datos oficiales, estos 11 000 casos representan más de un tercio del total de militares israelíes históricamente afectados por conflictos desde 1948.
La tasa anual de suicidios también ha aumentado: antes de la guerra, el promedio era de 13 suicidios por año; en el último año, 21 soldados se quitaron la vida, sin incluir a quienes lo hicieron tras abandonar el servicio. Entre enero de 2024 y julio de 2025, 279 soldados intentaron suicidarse, pero sobrevivieron, según datos del Parlamento israelí.
Para hacer frente a la crisis, se han desplegado equipos de psicólogos y especialistas en salud mental, habilitado líneas telefónicas de asistencia, organizado sesiones grupales y asignado cientos de oficiales de salud mental. Sin embargo, expertos advierten que Israel aún no está preparado para enfrentar la magnitud del problema.
El subdirector general y jefe del Departamento de Planificación del Ministerio de Guerra del régimen israelí, Itamar Graf, subrayó que cada suicidio representa “un fracaso para nosotros” y enfatizó la necesidad de una supervisión más rigurosa y de tratamientos especializados para los soldados afectados.
Por su parte, el psicólogo Hagai Hermesh, fundador de la asociación Para la Vida, advirtió que las cifras oficiales reflejan solo “la punta del iceberg”, al estimar que entre 500 y 700 suicidios anuales podrían no registrarse en los informes oficiales, lo que pone de manifiesto la gravedad de la crisis.
Además, según el portal hebreo Shomrim, la mayoría de los suicidios recientes se ha registrado entre soldados de reserva, quienes enfrentan una doble exposición al conflicto desde el 7 de octubre de 2023. Yossi Levi Blaz, del Centro de Investigación del Suicidio de la Universidad Ruplin, advirtió que la acumulación de traumas podría desencadenar una nueva ola de suicidios dentro del ejército israelí.
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