El Movimiento de Resistencia Islámica (HAMAS) ha denunciado este viernes que las sanciones impuestas por el Gobierno estadounidense a la relatora especial de derechos humanos de la ONU en los territorios palestinos ocupados, Francesca Albanese, son una muestra del “flagrante sesgo” de Washington en favor de los crímenes de guerra israelíes en la Franja de Gaza
En otra parte de sus declaraciones, el movimiento palestino señaló que la medida de Washington representa además “su desprecio por las instituciones internacionales y sus representantes”, además de “socavar los pilares del Derecho Internacional y Humanitario, e incitar a los líderes de la ocupación, que son criminales de guerra, a continuar con sus crímenes”.
HAMAS ha manifestado que “la Administración estadounidense debe revisar dichas políticas, que la sitúan como socio de facto en la campaña para asesinar niños y mujeres y destruir la vida civil en Gaza”.
En este sentido, el movimiento de HAMAS ha pedido a Washington que ponga fin a su encubrimiento criminal de la masacre en marcha desde hace 21 meses en Gaza.
En su reciente informe, Francesca Albanese acusó a más de 60 empresas internacionales de complicidad en los crímenes israelíes en Gaza y de apoyar los asentamientos ilegales en Cisjordania. En este informe de 27 páginas, describió estas acciones como parte de una “campaña genocida”.
El informe se basa en más de 200 documentos e información de gobiernos, defensores de derechos humanos, empresas y académicos.
El secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, anunció el miércoles embargos contra la italiana bajo la acusación de llevar a cabo una “campaña” contra Israel y Estados Unidos.
Las sanciones a Albanese forman parte de los intentos de Washington por garantizar la impunidad de Israel. Estas se aplican un mes después de que el país norteamericano imponga embargos a cuatro juezas de la Corte Penal Internacional (CPI) por emitir orden de arresto contra Netanyahu.
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