Hamza Abu Sneineh, de 30 años, ha perdido la vida en la mañana de este viernes, según ha informado la agencia local de noticias Wafa.
Sneineh, fue uno de los cientos de fieles palestinos que resultaron heridos y agredidos durante un brutal asalto de las fuerzas israelíes al recinto sangrado, ubicado en la ocupada ciudad palestina de Al-Quds (Jerusalén), el 7 de mayo de 2021.
En el asalto, llevado a cabo durante la celebración musulmana de la Noche del Destino (Laylat al-Qadr, en árabe), en el sagrado mes de Ramadán —mes de ayuno musulmán—, los militares israelíes atacaron a los fieles con gases lacrimógenos, granadas aturdidoras y balas de acero recubiertos de goma. La brutal incursión israelí provocó condenas a nivel internacional.
Sneineh sufrió múltiples fracturas de cráneo y perdió el ojo izquierdo como consecuencia de la brutal agresión. Fue trasladado de inmediato al Hospital Hadassah Ein Kerem en Al-Quds para recibir tratamiento. Sin embargo, el joven, que aún no se había recuperado físicamente, fue detenido por las fuerzas israelíes varios días después y puesto en libertad más tarde.
Últimamente, fuentes médicas habían anunciado que la salud de Sneineh se deterioró significativamente en las semanas previas a su muerte como consecuencia de las graves heridas que sufrió.
Los frecuentes asaltos de las tropas israelíes a la Mezquita Al-Aqsa y la brutal represión de los fieles en el recinto en mayo de 2021 hizo estallar un conflicto de 11 días entre la Resistencia palestina en la Franja de Gaza y la ocupación israelí, un choque que se cobró la vida de al menos 260 palestinos, incluidos 66 niños.
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