Mediante un comunicado emitido el domingo, el Ministerio de Asuntos Exteriores y Expatriados de Palestina instó a los Estados a procesar a entidades que ayudan a la expansión de los asentamientos ilegales israelíes en los territorios ocupados, y eviten que sus dueños ingresen a sus tierras.
Pidiendo una seria intervención internacional para obligar al régimen israelí a detener la escalada en los territorios palestinos ocupados para evitar una explosión de la situación, la nota instó a la comunidad internacional a adoptar una postura firme contra los crímenes israelíes y de los colonos y mantenerse firme en la aplicación del derecho internacional sobre la situación en Palestina.
Conforme a la declaración, los continuos abusos contra los derechos humanos por parte de Israel son un reflejo de la campaña de incitación dirigida por ministros extremistas del régimen israelí, como el ministro de seguridad, Itamar Ben-Gvir, y el de finanzas, Bezalel Smotrich.
“El régimen israelí intenta desesperadamente ocultar y legitimar los crímenes de las fuerzas de ocupación y busca dar la impresión a la comunidad internacional de que el conflicto sobre Cisjordania ocupada es entre palestinos e israelíes”, se leyó en el texto.
Esto se produce cuando el régimen israelí ha estado presionando con su expansión de asentamientos ilegales en los territorios palestinos a pesar de las protestas internacionales. La política ha contado con el apoyo del gabinete extremista del primer ministro Benjamín Netanyahu.
En este sentido, la oenegé israelí Peace Now (Paz Ahora) declaró el 14 de julio que Netanyahu ha construido 2855 unidades de vivienda para los colonos en la ocupada Cisjordania desde el mes de enero del presente año, lo que representa el número más alto registrado desde que comenzó a practicar tales actividades en 2012.
Para los palestinos, estos planes constituyen una amenaza para la seguridad y la paz de la región, que se encuentra en un estado de tensión debido a las políticas y prácticas de persecución, racismo y limpieza étnica aplicadas por el régimen de ocupación contra el pueblo palestino.
Por su parte, el Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS), a su vez, ha denunciado los proyectos sionistas para construir aún más viviendas ilegales en la Palestina ocupada como otra “agresión abierta contra la nación palestina”, asegurando que la medida empujará a los palestinos a “permanecer unidos frente a los crímenes israelíes”.
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