“La visita de Biden a la región tiene como objetivo destruir la cuestión palestina y fortalecer la influencia del régimen sionista”, precisó el sábado el líder del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS), Ismail Haniya.
Hablando ante una conferencia islámica en Beirut, la capital libanesa, el titular palestino consideró como “muy peligrosa” la normalización de las relaciones entre ciertos países árabes e Israel, además de enfatizar que la resistencia es la única opción estratégica para hacer frente al enemigo ocupante.
Tras advertir sobre consecuencias del viaje del mandatario estadounidense a la región, Haniya indicó que hay un plan en marcha para reorganizar la zona, a favor de los intereses de la alianza estadounidense-israelí.
El mandatario estadounidense tiene planeado viajar a la región de Asia Occidental del 13 al 16 de julio, un periplo que consiste en una visita de dos días a los territorios ocupados por Israel y que también lo llevará a Arabia Saudí.
Conforme al dirigente de HAMAS, Israel hace todo para expandir más su influencia en Asia Occidental, enfatizando que, ahora este régimen se está integrando en la zona a través de “alianzas militares para enfrentar a Irán, Hezbolá y HAMAS”.
En otra parte de su discurso, Haniya describió la batalla de Espada de Al-Quds —que lanzó la Resistencia palestina contra el régimen de Tel Aviv del 10 al 21 de mayo de 2021— como un punto de inflexión en el proceso de la guerra contra la ocupación israelí, lo que, a su juicio, fortaleció la Resistencia, pero que todavía necesita asistencia.
En este contexto, el jefe del buró político de HAMAS aseveró que la Resistencia conoce muy bien a su enemigo, puesto que, “está luchado con él en las cárceles y en las calles de Palestina”, para luego recalcar que hoy la causa palestina ha llegado al punto en que el régimen sionista no se atreve a iniciar otro sabotaje.
Sus comentarios se produjeron en reacción a las declaraciones del ministro israelí de asuntos militares, Benny Gantz, quien afirmó el 20 de junio que Israel está construyendo una alianza regional de defensa aérea patrocinada por EE.UU. en cooperación con algunos Estados árabes regionales en contra de Irán. Desde Irán, creen que este régimen, por los desafíos que encara a nivel interno, no está a la altura de hablar de guerra con Irán.
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