En su conferencia matutina, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, criticó el lunes las medidas antimigrantes aplicadas por los estados estadounidenses de Texas y Florida, y exigió a sus gobernadores, Greg Abbott y Ron de Santis, respectivamente, así como a los partidos Republicano y Demócrata, que mejor se concentren en una propuesta para evitar la venta de armas en supermercados.
El mandatario mexicano realizó estas declaraciones después de que Abbott anunciara la misma jornada el despliegue de una nueva unidad de la Guardia Nacional que operará con helicópteros para evitar la entrada de migrantes desde México.
Al respecto, pidió a los gobernadores de Texas y Florida que dejen de recibir dinero de la industria bélica para sus campañas electorales.
En concreto, denunció que Santis “está tomando medidas contra migrantes porque quiere ser candidato”. “¿Qué, no puede hacer otra propuesta para convencer a la gente?,¿tiene que valerse del dolor del pueblo del migrante, de la necesidad de la gente para sacar raja política? Eso es inmoral. Eso es politiquería”, dijo.
De hecho, Santis impulsó una iniciativa antimigrante —aprobada a principios de mes en el Congreso— a solo unas semanas de que formalice su candidatura para las elecciones presidenciales de 2024.
México reprocha el trasiego clandestino de armas desde EE.UU., lo cual mantiene ya un ritmo constante a pesar de la demanda a varias empresas estadounidenses.
tqi
