El programa que cuestiona la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), lleva por nombre “Guardianes de la Patria”. Consiste en una subordinación directa de los estudiantes de primaria y secundaria del sector público.
Un reciente informe presentado por la CIDH en su última visita a Honduras, expresa que su preocupación por el plan Guardianes de la Patria, que introduce a las fuerzas armadas y la Policía en el ámbito educativo, con la finalidad de controlar la presencia de maras y pandillas en las escuelas, así como la venta y el consumo de drogas.
Este proyecto entró en vigencia desde el año 2014, con la llegada de Hernández al poder. A esto la CIDH consideró en su informe que “dicho programa impulsa una cultura castrense y contraria a la paz, además de estigmatizar y poner en riesgo a los niños y las niñas de determinados sectores sociales.
A mi espalda esta el Estado Mayor Conjunto, donde HispanTV trató de conocer la versión oficial de las fuerzas armadas, algo que fue negado a esta cadena de televisión.
Ya Honduras ha recibido recomendaciones de la eliminación de este programa, en el año 2015, el Comité para los Derechos del Niño de Naciones Unidas (CRC, por sus siglas en inglés); llamó al Estado hondureño a abandonar el programa. Debido a que los niños se desarrollan en cuarteles u otras instalaciones militares.
El presidente hondureño tiene una formación militar desde su juventud, por eso la intención de adoctrinar a los menores de edad en las armas.
Dassaev Aguilar, Tegucigalpa.
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