China desplegó su última generación de cazas furtivos, tanques y misiles balísticos ante miles de espectadores seleccionados en la Plaza de Tiananmén, durante un desfile celebrado el miércoles por la mañana y presidido por el presidente Xi Jinping, con la asistencia de más de 25 altos líderes extranjeros, entre ellos el presidente ruso Vladimir Putin y el líder norcoreano Kim Jong Un.
En la ceremonia, Pekín mostró sus sistemas de armamento más avanzados, incluidos misiles hipersónicos DF-17, así como sistemas y submarinos no tripulados. La demostración de fuerza envió un mensaje de disuasión a potencias como Estados Unidos, India y Japón, subrayando la creciente influencia militar de China en la región.









dgh/rba