Los firmantes del manifiesto se oponen a un tratado similar con Canadá, el Acuerdo Integral de Economía y Comercio (CETA, en sus siglas inglesas), por los desastrosos efectos que piensan que tendrá sobre los sistemas políticos europeos, al subordinar los poderes legislativos nacionales a las grandes empresas transnacionales.
El movimiento contra la nueva alianza, que denuncia además el gran secretismo con que se negocia el TTIP, al menos desde 2013, ha anunciado movilizaciones de protesta a gran escala en toda Europa en el mes de octubre.
mla/ktg/nal
