En declaraciones ofrecidas este viernes durante la inauguración de la construcción de un hito turístico en el valle de Bekaa, el secretario general del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá) ha subrayado que EE.UU. debería otorgar a la nación libanesa sus derechos sobre la demarcación de fronteras marítimas con el enemigo sionista.
En este sentido, ha advertido a EE.UU., mediador de diálogos entre Israel y El Líbano, que no pierda el tiempo en conversaciones sobre la demarcación de fronteras marítimas que reclaman Beirut y el régimen de Tel Aviv.
Asimismo, ha apostillado que “el tema de las fronteras marítimas, el campo de Karish, el petróleo y el gas y los derechos libaneses no tienen nada que ver con el acuerdo nuclear” iraní.
El líder de Hezbolá ha subrayado que se logre o no el referido acuerdo nuclear, si el Líbano consigue lo que quiere durante las conversaciones indirectas con Israel, con EE.UU. como mediador, el movimiento avanzará hacia la paz, en caso contrario, hacia la intensificación de la situación.
En otra pare de sus declaraciones, ha recordado que se estableció el primer campo de entrenamiento militar en Janta (oeste de El Líbano), donde los voluntarios solían venir para unirse a la Resistencia libanesa. Según el alto responsable de Hezbolá, la primera y la segunda generación de fuerzas de la Resistencia recibieron entrenamiento en colinas y valles de Janta.
Asimismo, ha afirmado que los miembros del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) entrenaron y lucharon codo a codo con los libaneses.
“Hezbolá ha comprado legítimamente todas las tierras en Janta para construir sitios para el turismo religioso”, ha precisado.
Los sitios de turismo religioso se construirán para conmemorar el 40.º aniversario de la fundación de Hezbolá como fuerza de la Resistencia.
¿De qué se trata la disputa?
Durante décadas, las líneas marítimas entre El Líbano y los territorios ocupados por Israel han sido un tema de gran controversia, ya que Beirut y el régimen de Tel Aviv aún se encuentran técnicamente en estado de guerra.
Además de violar una y otra vez las aguas territoriales del país árabe, Israel no deja a El Líbano perforar en busca de petróleo y gas en el campo de Karish.
Ante tal circunstancia, El Líbano ha enfatizado que no renunciará a la soberanía sobre el último centímetro de sus aguas territoriales, mientras el Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá) ha asegurado que está listo para utilizar todo su poderío en el caso de que el Gobierno libanés confirme violación marítima por ese régimen.
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