• El presidente de EE.UU., Joe Biden, habla durante una ceremonia en la Casa Blanca, 3 de mayo de 2023.
Publicada: viernes, 5 de mayo de 2023 22:17
Actualizada: sábado, 6 de mayo de 2023 1:23

Joe Biden y su equipo apuestan a la discreción y el silencio, con la estrategia del jardín de rosas, evadiendo crisis y errores ante las presidenciales de 2024.

El presidente demócrata está instrumentalizando lo que en política se conoce como “la estrategia del jardín de rosas” en que el aspirante elige pasar desapercibido, mientras que los otros candidatos se lanzan con todo su arsenal. La estrategia es hacer campaña discreta dejando espacio para que los republicanos aviven el caos, se desgarren entre sí y, sobre todo, cometan errores no forzados.

A su vez, Biden se mantiene al margen durante el mayor tiempo posible, pero eso sí mostrándose como la persona más seria, el más responsable, según ha indicado el analista político Julian Zelizer a la cadena estadounidense CNN.

Conforme al experto, esta estrategia convierte al Partido Republicano en el foco de la elección, lo que le permite a Biden reforzar su mensaje de 2020: ¿los votantes quieren a alguien que gobierne y actúe de manera seria o quieren un circo?

El exmandatario Donald Trump fue el primero en anunciar su candidatura, pero su demanda civil por acusaciones de violación y difamación hasta el caso en Georgia centrado en su esfuerzo por anular las elecciones presidenciales, le hacen poseedor del título de candidato presidencial en el mayor peligro legal de la historia. El magnate inmobiliario rechaza todas las acusaciones, incluso dice que, aunque sea condenado no se retirará de la carrera.

 

La exembajadora de la ONU Nikki Haley y el senador Tim Scott de Carolina del Sur están tratando de ganarse su postulación, aunque los republicanos esperan que el gobernador de Florida, Ron DeSantis, haga su movimiento. Si bien DeSantis podría desafiar a Trump en las primarias en este momento, también está abanderando posiciones radicales y extremas que le podría pasar factura.

Biden y la vicepresidenta, Kamala Harris, parecen estar apostando a que, en los próximos meses, los republicanos pueden hacerse mucho más daño a sí mismos que los demócratas si los critican. Dejan que los republicanos sean republicanos y demuestren que “no son personas serias”.

El 25 de abril del año en curso, Biden anunció, mediante un vídeo, que se postula a la reelección en los comicios de 2024, además de pedir a los votantes que le den más tiempo para “terminar el trabajo” y en el que denunció los ataques de los “extremistas republicanos” contra las libertades individuales.

Sin duda, la “estrategia del jardín de rosas” ha fallado antes: los presidentes Gerald Ford y Jimmy Carter, un republicano y un demócrata, usaron esta táctica en 1976 y 1980 y ambos perdieron sus respectivas campañas de reelección.

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