Según el portal estadounidense Bloomberg, los funcionarios familiarizados con el tema, bajo condición de anonimato, indicaron que la decisión de permanecer en silencio se tomó ante el viaje del secretario de Estado de EE.UU., Anthony Blinken, a China.
El globo ya había salido del espacio aéreo estadounidense, pero a principios de esta semana volvió a entrar en el estado norteño de Idaho antes de llegar a Montana (noroeste), lo que imposibilitó que su presencia en el cielo pueda seguir manteniéndose en secreto, conforme a dichas fuentes.
Cuando el objeto se hizo visible a la gente, el presidente de EE.UU., Joe Biden, ya había sido notificado y la Casa Blanca estaba considerando derribarlo. El problema se vio agravado por el hecho de que Montana es el hogar de la base de la Fuerza Aérea Malmstrom, que alberga una gran cantidad de misiles balísticos intercontinentales Minuteman III.
Al respecto, la Cancillería china enfatizó, en un comunicado emitido el viernes, que “la aeronave es de China, es de naturaleza civil y se usa para investigaciones meteorológicas y científicas. Debido a la influencia de los vientos del oeste y su limitada capacidad de control, la aeronave se desvió de su ruta determinada”.
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