“Ciertamente si no gano, no gano. Es decir, ya sabes, seguir y hacer otras cosas”, manifestó el mandatario republicano en una entrevista concedida este viernes a la cadena de televisión estadounidense Fox News.
El jueves, el candidato presidencial del Partido Demócrata, Joe Biden, recalcó que su mayor preocupación es que Trump pueda intentar robar las elecciones y se resista a dejar su cargo. En este sentido, el inquilino de la Casa Blanca se defendió, alegando que Biden “ha creado su propia ciudad santuario en el sótano o donde sea que esté y no sale”.
Esto mientras que, según una reciente encuesta, la gestión de Trump ante la crisis sanitaria provocada por el nuevo coronavirus y las protestas antirracistas ha generado la pérdida de intención de voto al mandatario republicano. Sin embargo, Trump, enfrentado a una ola de críticas, declaró que perder las elecciones de noviembre sería “algo triste” para el país, porque los demócratas tienen políticas que incluyen “deshacerse de los departamentos de policía” o “no hacer nada” para enfrentar los disturbios”.
En otra parte de la entrevista, el presidente estadounidense culpó a los alcaldes “muy liberales” e “izquierdas radicales” de EE.UU. de agravar la situación preocupante que se vive en el territorio estadounidense, por manifestaciones en rechazo al brutal asesinato de George Floyd, afroamericano que murió el 25 de mayo a manos de la Policía norteamericana.
“No es que no estuvieran en ciudades republicanas. Todas (las manifestaciones) estaban en ciudades que, francamente, creo que tengo la oportunidad de ganar en muchas de esas ciudades. Pero todas eran ciudades dirigidas por demócratas de izquierda radical”, alardeó.
Mientras que se acercan las elecciones, las muestras de desconformidad del país a la gestión de Trump sobre las protestas contra el racismo, la discriminación, la violencia y el odio en EE.UU. pueden generar más que algún dolor de cabeza al presidente en sus intentos por la reelección ante su rival demócrata, Biden.
Biden, quien fue la mano derecha del expresidente de EE.UU. Barack Obama durante ocho años, ha cuestionado varias veces la gestión de Trump no solo ante la pandemia, sino también ante las protestas.
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