El fiscal especial que investiga el caso “Rusiagate”, conminó a la Organización Trump, a través de un comparendo, a presentar documentos relacionados a sus negocios. La medida parece orientar la investigación a objetivos financieros.
Wayne Madsen periodista de investigación dice haber encontrado una red criminal de cerca de dos mil individuos que tendrían vínculos con Donald Trump, incluido el expresidente de Panamá, Ricardo Martinelli.
El comité de Inteligencia de la Cámara Baja, de mayoría republicana, decidió cerrar, por falta de evidencias, la investigación que conducía sobre la injerencia de Rusia en las elecciones. El comparendo a la Organización Trump fue emitido horas después. La Casa Blanca se negó a comentar al respecto.
Lo que comenzó como una investigación sobre una supuesta injerencia rusa en las elecciones para favorecer a Donald Trump, parece estar tomando un giro hacia posibles delitos financieros.
Paul Manafort, expresidente de la campaña de Trump, fue el primer acusado de delitos financieros en la investigación conducida por Muller.
El pasado mes de julio, Trump había sugerido que investigar sus negocios, sería cruzar una línea roja; el fiscal Muller parece haberla cruzado y está ahora, navegando en aguas de riesgo para el presidente; pero el riesgo no sería Muller, sino las propias acciones de Trump.
Alfredo Miranda, Washington
akm/msf