El diario israelí Maariv informó el pasado jueves de que las autoridades israelíes, preocupadas por posibles ataques de Yemen, habían ordenado el despliegue de sistemas antimisiles Cúpula de Hierro en la ciudad de Eilat, ubicada en el sur de los territorios ocupados de Palestina.
“Se supone que el despliegue de sistemas de interceptación protegerá las bases militares en la región de Eilat y sus habitantes, e Israel está tratando de prepararse para tales ataques”, dijo al respecto el analista israelí Shlomo Riesel.
Riesel subrayó las operaciones del Ejército yemení contra objetivos en Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos (EAU), llevadas a cabo en respuesta a los crímenes de la coalición agresora del régimen de los Al Saud, admitiendo que “lo preocupante es que tales objetivos se encuentren a unos 1500 kilómetros de la capital yemení, Saná”.
El analista añadió que lo que genera preocupación es que el movimiento popular yemení Ansarolá haya podido aumentar el alcance de sus aviones no tripulados (drones) al punto de enviarlos al puerto de Eilat. La segunda preocupación son los misiles balísticos de Ansarolá, agregó.
Por lo tanto, según Riesel, el régimen sionista siempre está tratando de evitar que sus barcos sean blancos de ataques secretos desde las bases navales o de inteligencia en Eritrea, que está al otro lado del estratégico estrecho de Bab el-Mandeb.
Sus comentarios tuvieron lugar después de que Fadl Abu Talib, un miembro del buró político de Ansarolá, amenazara el pasado 10 de enero con efectuar ofensivas contra el régimen de Israel, si este comete cualquier error contra el país árabe.
Eso, sin embargo, se produjo luego de que el portavoz del ejército israelí, Hidai Zilberman, señalara que este régimen ha estado monitoreando de cerca la situación en Yemen. Mientras tanto, las autoridades yemeníes advierten que cualquier agresión israelí contra Yemen desencadenará una guerra en toda Asia Occidental, e Israel será el primero en sufrir
El periodista israelí Yoni Ben Menachem, a su vez, refiriéndose a esta amenaza, dijo que, de acuerdo con “las estimaciones de la inteligencia israelí”, los yemeníes podrían apuntar a buques del régimen de Tel Aviv en el mar Rojo y Bab el-Mandeb, algo que ya habían hecho con éxito contra los objetivos saudíes.
mrp/ctl/mjs
