“Arabia Saudí no merece una invitación al diálogo mientras continúa atacando territorio yemení”.
“Arabia Saudí no merece una invitación al diálogo mientras continúa atacando territorio yemení”, afirmó el domingo el portavoz de Ansarolá, Mohamad Abdel Salam, en una entrevista con la cadena de televisión libanesa Al-mayadeen.
Abdel Salam criticó las injerencias de Riad en los asuntos internos de su país e insistió en que los ciudadanos yemeníes, y por extensión las distintas facciones políticas, deben resolver cualquier cuestión política de su país a través de conversaciones en el seno de la nación.
Además, el portavoz de Ansarolá reiteró que las decisiones “ilegales” del presidente fugitivo yemení Abdu Rabu Mansur Hadi carecen de valor para Saná.
“El grupo no reconocerá las decisiones promulgadas por Hadi”, dijo Abdel Salam, horas después de que Hadi nombrara a su ex primer ministro Jaled Bahah nuevo vicepresidente.
“El grupo no reconocerá las decisiones promulgadas por Hadi”.

Conforme a los datos proporcionados el pasado jueves por el portavoz de las Fuerzas Armadas yemeníes, el coronel Sharaf Luqman, el número de personas muertas en la agresión saudí, iniciada el pasado 26 de marzo, asciende a más de un millar, incluidos 200 niños, y unas 15 000 que han resultado heridas.
En otra parte de sus declaraciones, Abdel Salam aseguró que ni los miembros de Ansarolá ni las fuerzas del Ejército habían tomado parte en la toma de una base militar saudí en las fronteras de su país con Arabia Saudí.
Los combatientes de la tribu yemení Tajiya expulsaron el domingo a las fuerzas saudíes de la base militar de Al-Menareh, ubicada en la ciudad de Baqem, provincia de Saada (norte), tras intensos enfrentamiento que dejaron 18 muertos en el lado saudí.
kaa/nii/msf
