La unidad noruega llegó el sábado a la zona de Al-Tanf, en el lado sirio de la frontera, lugar donde se encuentran los combatientes del llamado Ejército Libre Sirio (ELS), un grupo armado que goza del apoyo de EE.UU. y que es considerado por Washington como “moderado”, según declaró Shakir Abid, un comandante militar iraquí, a la cadena local NRT en árabe.
Este portal indica que el Ejército iraquí, los guardias fronterizos iraquíes y la policía federal iraquí habría proporcionado un paso seguro al contingente noruego para unirse a las fuerzas estadounidenses y británicas ya desplegadas en el este de Homs, a pesar del contundente rechazo del Gobierno de Damasco al respecto.
El Ejército sirio y sus aliados en la lucha antiterrorista, como el Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), denuncian la presencia ilegal de militares estadounidenses en su suelo, ya que no creen que estén interesados en combatir a los terroristas del EIIL (Daesh, en árabe), sino más bien en preparar el terreno para imponer una zona prohibida de vuelo, para luego colocar al Gobierno de Damasco en su punto de mira.
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