En una carta dirigida al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) y al secretario general de ONU emitido el viernes, el embajador permanente de Irán ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Amir Said Iravani, destacó que este grupo terrorista cuenta con apoyo de extranjeros y llevó a cabo esta operación terrorista dos días después de que el régimen de Israel atacara la sección consular de la embajada iraní en Damascos, capital siria.
Al hacer alusión a los ataques terroristas de Yeish al-Adl en las ciudades de Chabahar y Rask en la provincia suroriental de Sistán y Baluchistán, Iravani aseveró que los terroristas atacaron cinco lugares públicos, bases militares y centros de seguridad con el fin de perturbar la estabilidad y paz y tomaron muchos civiles como rehenes.
Destacando que la reacción rápida y valiente de las fuerzas de seguridad frustró sus intentos de tomar el control de los centros militares y de seguridad de las ciudades mencionadas. Además, durante la operación antiterrorista, las fuerzas iraníes lograron liberar a todos los rehenes.
Al hacer referencia a las víctimas de este acto terrorista, Iravani destacó que Irán condena rotundamente los actos de terrorismo, enfatizando su compromiso inquebrantable de garantizar el juicio y la rendición de cuentas de los responsables.
Asimismo, instó al CSNU a condenar estos actos terroristas contra civiles y empleados iraníes, y a tomar iniciativas adecuadas en línea con sus compromisos de luchar contra el terrorismo en todas sus formas y manifestaciones.
“Irán, que ha sufrido directamente las desastrosas consecuencias del terrorismo, se mantiene firme en su compromiso inquebrantable de liderar la lucha contra este flagelo”, resaltó.
En los últimos años, la provincia de Sistán y Baluchistán de Irán, que limita con Pakistán y Afganistán, ha sido testigo de varios ataques terroristas contra civiles y fuerzas de seguridad perpetrados por grupos terroristas refugiados en los países vecinos.
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