En una carta remitida el jueves al secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, y al presidente rotatorio del Consejo de Seguridad de la ONU (CSNU), Yamazaki Kazuyuki, el embajador permanente de Irán ante el organismo internacional, Amir Said Iravani, denunció las acusaciones y amenazas del régimen israelí.
Recalcó que dichas imputaciones carecen totalmente de fundamento y se rechazan categóricamente, afirmando que el régimen israelí recurriendo a dichas medidas intenta desviar la atención de la comunidad internacional de las atrocidades y el genocidio que está cometiendo contra el pueblo palestino en la Franja de Gaza.
“Si bien advierte enérgicamente sobre cualquier aventurerismo militar o actividades maliciosas del régimen israelí en la región, la República Islámica de Irán se reserva su derecho legítimo e inherente, de conformidad con el derecho internacional y la Carta de las Naciones Unidas, a tomar todas las medidas necesarias para responder a cualquier amenaza o ataque proveniente del régimen israelí contra su seguridad e intereses nacionales y su pueblo”, enfatizó.
También reafirmó el derecho inherente de Siria y El Líbano según el derecho internacional a tomar todas las medidas necesarias en respuesta a cualquier amenaza o ataque y acto de agresión por parte del régimen israelí contra su soberanía, independencia e integridad territorial.
La denuncia de Irán se produce luego de que en una carta enviada a la ONU, Israel alegara que el país persa ha intensificado las entregas de armas al Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá).
El régimen de Israel libró la devastadora guerra en Gaza el 7 de octubre, dejando al menos a 30 800 palestinos muertos, en su mayoría mujeres y niños, y heridos a otros 72 298.
La entidad sionista ataca con frecuencia posiciones militares dentro de Siria, especialmente a las pertenecientes a Hezbolá, que ha desempeñado un papel clave ayudando al Ejército sirio en su lucha contra los terroristas respaldados por el extranjero.
El ejército usurpador israelí ha estado llevando a cabo también ataques contra el territorio libanés desde el inicio de la guerra en Gaza, lo que provocó ataques de represalia por parte de la Resistencia libanesa en apoyo al pueblo palestino en la Franja de Gaza.
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