“El falso régimen sionista, que cuenta con el apoyo de las arrogantes potencias globales, ciertamente desaparecerá. La injusticia y la opresión nunca pueden durar para siempre, y ésta es una promesa divina. Lo que perdurará es la justicia”, ha subrayado este sábado el presidente de Irán, Seyed Ebrahim Raisi, ante miles de personas en la ciudad noroccidental de Zanyán.
Raisi ha afirmado que la animosidad de los enemigos hacia la nación iraní, la Revolución Islámica de 1979, el sistema islámico y el mártir comandante antiterrorista, el teniente general Qasem Soleimani, se debe al hecho de que la República Islámica y el Líder de la Revolución Islámica, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, concede especial importancia a los derechos de los palestinos oprimidos.
“Este es el énfasis de nuestra religión y nuestra política es defender a los pueblos oprimidos del mundo”, ha agregado.
El mandatario persa ha manifestado que el difunto fundador de la República Islámica, el Imam Jomeini (que descanse en paz), planteó la cuestión del apoyo a la causa palestina y enfatizó la necesidad de la liberación de la ciudad santa de Al-Quds (Jerusalén) y la eliminación del régimen israelí como un tumor canceroso durante más de cuatro décadas.
La “insistencia de Irán en la legitimidad de Palestina después de cuatro décadas ha quedado clara para todo el mundo”, ha señalado.
Según Raisi, si bien el apoyo del pueblo iraní a los palestinos ha generado enemistad y ataques verbales contra ellos durante las últimas cuatro décadas, los iraníes se han mantenido firmes en su respaldo.
“Durante estas cuatro décadas, el enemigo se enemistó con la nación iraní. Sancionó y amenazó, impuso un bloqueo económico y hizo enemistades de diversos tipos, pero la nación iraní venció en esta guerra de voluntades”, ha aseverado.
El presidente ha resaltado que los enemigos, a pesar de numerosos intentos y amenazas, han fracasado estrepitosamente en sus complots contra Irán, mientras que los jóvenes especialistas iraníes han adquirido y empleado tecnologías de vanguardia.
“Creían que podían alejarnos de la industria nuclear, pero no pudieron. Lo mismo ocurrió en la industria militar, pero se han realizado muchos grandes trabajos y hay muchos trabajos en curso”, ha indicado.
Raisi ha puntualizado asimismo que los enemigos querían que la economía no creciera, pero creció; querían detener la producción, pero reactivamos muchas unidades de producción inactivas y semiactivas.
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