“Desafortunadamente, las autoridades de algunos países europeos utilizan los derechos humanos como herramienta en [sus] juegos políticos para interferir en los asuntos de otros países y condenamos este enfoque destructivo”, ha indicado el portavoz de la Cancillería de Irán, Naser kanani, en reacción a los comentarios intervencionistas del presidente francés, Emmanuel Macron, sobre los recientes disturbios en Irán.
El vocero iraní afirmó que la política de principios de Irán es el respeto y el cumplimiento de los fundamentos de los derechos humanos, incluida la protección de la dignidad humana y la lucha contra la opresión y la defensa a los oprimidos.
Por otra parte, Kanani ha denunciado que “los falsos defensores de los derechos humanos son cómplices de flagrantes violaciones de esos derechos al dar refugio a líderes y miembros de grupos terroristas en sus países y apoyarlos, y al permanecer en silencio ante la masacre diaria de palestinos por el régimen infanticida sionista y apoyando la agresión y la ocupación”.
“Desafortunadamente, Francia, bajo el pretexto de defender el principio de la libertad de expresión, considera la reacción de los musulmanes contra los insultos al Sagrado Corán y sus creencias religiosas como un ataque contra la laicidad, pero ha olvidado que prohibir las críticas al régimen sionista es una violación indudable del principio de la libertad de expresión”, ha criticado.
Kanani concluyó que es evidente que tales contradicciones de comportamiento y la política de doble rasero de Francia no quedan y no quedarán ocultas a los ojos de las personas independientes y que buscan la libertad en el mundo.
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