“Debemos fortalecer nuestras relaciones políticas, ampliar la cooperación en los ámbitos bilateral, regional e internacional y luchar juntos contra el terrorismo, en particular hacer frente al terrorismo económico de EE.UU., que impuso sanciones tanto a nosotros como a Rusia”, ha declarado este miércoles el nuevo embajador de la República Islámica en Rusia, Kazem Yalali, en declaraciones a la agencia rusa Sputnik.
Irán y Rusia se han visto afectados por la política de restricciones de EE.UU., la cual supone un castigo ilegal contra ambos países, según denuncian las autoridades persas y rusas.
Ante esta situación, Yalali ha enfatizado la necesidad de que Teherán y Moscú afiancen cooperaciones, en concreto en el sector económico y comercial, y al respecto ha recordado el buen potencial de ambos países para impulsar exportaciones e importaciones bilaterales.
El diplomático persa, en otro momento de sus declaraciones, ha expresado que espera el aumento de los ejercicios militares conjuntos en mar y tierra.
En el mismo sentido, ha aludido a la maniobra conjunta que harán en los próximos tres días Irán, China y Rusia en el océano Índico para ensayar el combate contra el terrorismo y la piratería.
Asimismo, ha asegurado que el objetivo de tales ejercicios “es la paz y la estabilidad en la región”, incluidos el océano Índico y el Golfo Pérsico, lo que ha considerado imprescindible para la expansión de los lazos económicos entre Irán y Rusia.
Yalali, exdiputado del Parlamento iraní, quien ha sustituido a Mehdi Sanai, ha entregado este miércoles su carta credencial al viceministro de Exteriores de Rusia, Igor Morgulov.
Luego, Yalali y Morgulov han mantenido una reunión, en la que han discutido los nuevos campos de cooperación entre Irán y Rusia.
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