El representante permanente de Irán ante la Oficina de las Naciones Unidas en Ginebra (Suiza), Esmail Baqai, afirmó el domingo que las sanciones y medidas punitivas de Estados Unidos tienen impactos graves en los derechos humanos y equivalen a crímenes contra la humanidad.
En declaraciones durante la 42.ª sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, Baqai añadió que la comunidad internacional coincide en que la imposición de embargos es contraria al Derecho Internacional.
El diplomático iraní advirtió que la continuación de tales enfoques ilegales amenazará la paz y seguridad mundial. Además, invitó a las naciones a adoptar estrategias legales para reducir impactos de las sanciones, enfatizando que el consenso de la comunidad internacional podría desempeñar un papel importante al respecto.
Asimismo, criticó a la alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, por no incluir en su informe los impactos negativos de las sanciones impuestas, y pidió una medida seria para aliviar el sufrimiento causado por algunos países.
El sábado, el canciller iraní, Mohammad Yavad Zarif, por su parte, consideró las sanciones de Washington contra el acceso del pueblo persa a medicamentos y tratamientos de salud como “terrorismo económico”.
Tras retirarse unilateralmente del Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés), nombre oficial del acuerdo nuclear firmado en 2015, EE.UU. ha intensificado su campaña de presión económica contra la República Islámica y ha impuesto varias rondas de sanciones contra el país persa.
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Las autoridades iraníes califican de “crímenes de lesa humanidad” los embargos y las restricciones impuestas por Estados Unidos que afectan al suministro de medicamentos y otras áreas del sector de la salud del país persa.
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