Miles de mexicanos marcharon el lunes al cumplirse ocho años de la desaparición de los alumnos de la normal rural de Ayotzinapa (estado de Guerrero, sur), en marco de la primera conmemoración desde que el Gobierno del presidente, Andrés Manuel López Obrador, presentó una nueva investigación del caso que responsabiliza a militares y altos funcionarios del país por la tragedia.
La multitud, encabezada por las madres y padres de los desaparecidos, protestó en pleno centro de la Ciudad de México para exigir que la justicia acelere el proceso y castigue a los responsables. “De las 83 órdenes de aprehensión, queremos que se cumplan, no que los estén dejando libres. Queremos que se detengan a todos los responsables, porque fue un crimen de Estado”, dijo uno de los manifestantes.
“¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos!”, fue la consigna más coreada por los manifestantes, indignados por la falta de transparencia. También levantaron carteles que responsabilizan al Estado y al Ejército de lo ocurrido.
En la marcha de #CDMX por 8 años sin justicia ni verdad para los 43 estudiantes desaparecidos de #Ayotzinapa, se despliega una manta para señalar la responsabilidad del Ejército en el crimen.#FueElEjercito #CrimenDeEstado #Ayotzinapa8años pic.twitter.com/ZFMzVLPWsO
— Red Rompe el Miedo (@RompeMiedo) September 26, 2022
Durante la movilización se registraron incidentes aislados de violencia, cuando un pequeño grupo de encapuchados se enfrentó con la Policía del país.
¿Qué revelan las investigaciones?
En el marco de un reporte, la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del caso Ayotzinapa afirmó en agosto que no hay indicio alguno de que los estudiantes normalistas desaparecidos en septiembre de 2014, Iguala, Guerrero, se encuentren con vida.
En efecto, según concluyó el organismo, la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa “constituyó un crimen de Estado, en el que concurrieron integrantes del grupo delictivo Guerreros Unidos y agentes de diversas instituciones del Estado mexicano”.
Además, el Gobierno mexicano desveló que 26 personas consideradas “testigos clave” vinculadas al caso “han fallecido o han sido ejecutadas”.
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