El ataque más intenso se produjo en Kiryat Shmona, el asentamiento ilegal israelí más grande de la zona, donde 100 misiles impactaron desde primeras horas del día. En la jornada anterior, dos personas murieron en un ataque similar en la misma localidad.
Además, medios israelíes reportaron que al menos 50 cohetes cayeron en las ciudades de Akka y Nahariya. Ante esta situación, el ministerio de seguridad pública de Israel activó las sirenas de emergencia en todo el norte de los territorios ocupados, sumiendo a más de una decena de ciudades y pueblos en estado de alerta.
Los enfrentamientos entre el Movimiento de la Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá) e Israel se han intensificado desde el inicio de la guerra en Gaza en octubre de 2023.
El movimiento libanés ha declarado que mantendrá sus ataques contra objetivos militares israelíes mientras continúe la ofensiva genocida de Israel en Gaza, que ha dejado un saldo de casi 42 065 palestinos muertos, según sus cifras.
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