• El presidente estadounidense, Joe Biden, junto al resto de líderes del G7 durante una exhibición de paracaidismo en Italia, 14 de junio de 2024. Foto: Europa Press
Publicada: sábado, 15 de junio de 2024 23:26

Los extraños episodios del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, durante la cumbre del G7, han generado dudas acerca de su óptimo estado de salud para gobernar.

En el marco del G7, que reunió del 13 al 15 a siete de las principales potencias mundiales en Apulia (sur de Italia), vídeos de varios incidentes embarazosos y momentos de desconexión en Biden es el protagonista se han hecho viral y se suman a la larga lista de ‘lapsus’ del líder estadounidense de 81 años y que en cinco meses buscará la reelección.

Una fuente diplomática afirmó al rotativo estadounidense The Sun que el mandatario demócrata no ha estado concentrado durante los debates, incluso el primer día la gente se avergonzó de sus errores públicos. “Es la peor condición en la que jamás haya estado [Biden]”, valoró. Mientras, asistentes de múltiples delegaciones describieron la actuación del presidente norteamericano como “vergonzosa”

Medios, sobre todo las redes sociales, han publicado escenas sobre varias acciones del presidente. Por ejemplo, Biden permaneció rígido durante casi un minuto mientras el resto de los asistentes, entre quienes se encontraba la vicepresidenta Kamala Harris, siguiendo el ritmo en un acto musical. Tampoco ha pasado desapercibido cuando el mandatario saludó torpemente a la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, besándole el cabello, y la hizo esperar 20 minutos, por lo que la ministra le soltó una sutil reprimenda humorística.

Lo que más se ha viralizado ha sido su extraño comportamiento durante una demostración de paracaidismo, en la que mientras otros líderes mundiales prestaban atención al ‘show’, el demócrata estadounidense se quedó observando al cielo y avanzó en una dirección completamente opuesta al resto con la mirada perdida, por lo que parecía un tanto desorientado. Y qué decir de su saludo al papa Francisco, pegando su frente a la del sumo pontífice.

Otro aspecto que llamó la atención fue la decisión de Biden de no asistir a una cena organizada para los líderes del G7 en un hotel de lujo en el sur de Italia, argumentando la ocupada agenda de la cumbre.

Estos momentos de Biden fueron aprovechados por el republicano expresidente Donald Trump (2017-2021) para su campaña como candidato presidencial de las elecciones de noviembre.

“¿Han visto? [Biden] va de un lado a otro y pasa un día y luego vuelve. Se queda dormido en cada evento”, comentó Trump. “La única gracia fue el aterrizaje en paracaídas. Todo el mundo estaba mirando y él se dio la vuelta en otra dirección. La nueva líder de Italia hizo un gran trabajo. Le dijo: ‘Date la vuelta, tonto’”, se burló.

La Casa Blanca, por su parte, responde a las críticas contra Biden diciendo que uno de los polémicos vídeos había sido editado para eliminar a los paracaidistas a los que el presidente saludaba, aclarando que Biden “no se había desorientado”.

La gestión de Biden ha estado marcada por varios tropiezos públicos, incluyendo caídas y momentos de aparente desconexión, lo que ha generado dudas sobre su aptitud para otro mandato. A medida que se acercan las elecciones, las preocupaciones sobre la capacidad de Biden para desempeñar sus funciones de manera efectiva y sostenida siguen aumentando entre los aliados diplomáticos y el público en general.

Además, la edad del mandatario se ha convertido en uno de los temas más delicados de su campaña a la reelección. Un sondeo de la Universidad Marquette muestra que el 79 % de los estadounidenses cree que la frase “demasiado viejo” describe “muy bien o bastante bien” a Biden, frente al 54 % que piensa lo mismo de Trump, quien justo el jueves cumplió 77 años.

ncl/rba