“Ahora que Mitch McConnell (líder de la mayoría en el Senado de EE.UU.) ha decidido reabrir el Senado la próxima semana, debe ordenar a los presidentes de sus comités para que comiencen inmediatamente el escrutinio necesario para investigar el enfoque de la Administración de Donald Trump ante la propagación de la COVID-19”, declaró ayer lunes el líder de la minoría demócrata del Senado, Chuck Schumer.
Schumer, el senador de Nueva York, el estado con más víctimas por el nuevo coronavirus, causante de la enfermedad COVID-19, de este modo, también pidió a los republicanos que investiguen sobre las deficiencias en medio de la lucha contra el virus.
Lo mínimo que se puede hacer, según las palabras del senador estadounidense, es realizar audiencias públicas en cuales se explica por qué Estados Unidos no tiene suficientes pruebas para diagnóstico del coronavirus.
“Los estadounidenses están muriendo y perdiendo sus empleos, y no tenemos suficientes kits de prueba”, indicó Schumer.
De acuerdo con las últimas cifras disponibles, el virus mortal ya ha dejado más de 1 millón de afectados y cerca de 57 mil muertos en todo el país norteamericano, y, en el estado de Nueva York, se registraron más de 298 mil casos y 22 mil muertos.
Esto ocurre mientras el presidente estadounidense ha recibido repetidas condenas por su inacción ante la rápida propagación del nuevo coronavirus en el país. De hecho, durante casi dos meses trató de minimizar los efectos de la COVID-19 e incluso mintió, asegurando que el número de casos estaba disminuyendo y que el virus iba a desaparecer “como un milagro”.
Sin embargo, según los reportes, varios estados del país están enfrentando una escasez de equipo médico y de protección personal, algo que ha creado una ola de críticas y rechazos por los médicos y enfermeros estadounidenses contra la gestión de su presidente ante la pandemia.
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