En las calles de diferentes ciudades chilenas, organizaciones sociales, movimientos y partidos políticos muestran a la derecha y a la socialdemocracia su oposición a que se ratifique el TPP-11, Tratado Integral Progresista de Asociación Transpacífico.
En efecto, la próxima semana, el martes 11 del presente octubre, el Senado chileno votará el proyecto que ratificaría este acuerdo comercial, lo que provoca más preocupación que expectativas.
Las grandes transformaciones sociales en Chile han surgido de las movilizaciones populares, clave frente al lobby de las grandes corporaciones que buscan un dominio de la economía nacional.
El primer punto de la tabla en el Senado para el próximo 11 de octubre, será el del TPP-11, a fin de que no se aplace, aspecto en el que los partidos socialdemócratas y de centroizquierda del Gobierno del presidente, Gabriel Boric, ven cada vez más como un buen negocio.
Manuel Arismendi, Chile.
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