El periódico hebreo Yediot Aharonot afirmó el jueves, citando a la autoridad tributaria de Israel, que los daños por los misiles iraníes alcanzaron este año un nivel sin precedentes.
Indicó que solo en un período de 12 días se registraron 53 599 solicitudes de compensación por daños directos.
Shay Aharonovich, director de la autoridad tributaria de Israel, declaró que los daños directos se estiman actualmente en al menos 4000 millones de shekels (1100 millones de dólares), y que los daños indirectos, aún no calculados, podrían sumar varios miles de millones más.
Estas cifras incluyen los graves daños al Instituto Weizmann, al Centro Médico Soroka y el cierre prolongado de muchos negocios.
De todas las solicitudes de compensación, 9803 se tramitaron mediante un proceso de revisión rápida. Los daños a propiedades fueron los más numerosos: se registraron 41 962 casos para edificios afectados, de los cuales 36 928 correspondieron a viviendas.
Cientos de casas quedaron completamente destruidas y deberán ser reconstruidas, un proceso que podría durar meses o incluso años. Mientras tanto, el gabinete deberá cubrir los costos de alojamiento temporal para los residentes desplazados.
Los daños a los negocios también alcanzaron niveles sin precedentes, con 5108 solicitudes registradas. Esto incluye cientos de tiendas y oficinas completamente destruidas. En total, se han revisado 28 129 casos de daños directos en dos meses.
Los daños a los vehículos también fueron sin precedentes: al menos 5400 automóviles resultaron destruidos o dañados por los ataques con misiles iraníes.
Hasta ahora, el fondo de compensación de impuestos sobre la propiedad de Israel ha pagado unos 1600 millones de shekels (430 millones de dólares) por daños directos.
El número de solicitudes por daños indirectos durante los 12 días de guerra alcanzó 98 569, casi el doble de los casos de daños directos.
De estas, 59 959 solicitudes han sido revisadas hasta ahora, y se han pagado aproximadamente 1000 millones de shekels (270 millones de dólares) como compensación parcial.
Las autoridades israelíes advirtieron que la cifra final, sumando los daños directos e indirectos, será varias veces mayor que las estimaciones actuales.
El conflicto de 12 días estalló el 13 de junio cuando el régimen israelí llevó a cabo un ataque sin motivo contra Irán, asesinando a 1069 personas, entre ellas altos mandos militares, científicos nucleares y civiles.
Menos de diez días después, Estados Unidos entró oficialmente en la guerra bombardeando tres instalaciones nucleares con fines pacíficos, protegidas por la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), en clara violación de la Carta de las Naciones Unidas y el Tratado de No Proliferación (TNP) Nuclear.
Irán respondió la agresión con fuerza lanzando cientos de misiles balísticos y drones contra objetivos estratégicos israelíes en los territorios ocupados en el marco de la operación sin precedentes ‘Verdadera Promesa III’, y un ataque de represalia contra la mayor base estadounidense en la región, lo que logró detener el asalto ilegal e imponer un alto el fuego a los agresores el 24 de junio.
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