Dicho plan, aprobado por el llamado comité municipal de planificación y construcción de Jerusalén, pide que el vertedero se cree en un área, gran parte de la cual pertenece a palestinos. El terreno tendrá por destino acoger miles de toneladas de residuos de la construcción.
Desde 1949, las autoridades del régimen israelí han dado inicio al plan de evacuación forzada contra los beduinos palestinos.
Hasta el momento, el régimen de Tel Aviv ha objetado reconocer los derechos de los beduinos y les niega el acceso a los servicios básicos.
haj/anz
