En las últimas horas de la noche del miércoles y las primeras horas de la mañana de este jueves, criminales ataques aéreos de Estados Unidos han tenido como objetivo varias zonas de Yemen. Los bombardeos han dejado tres muertos y decenas de civiles heridos, incluidos mujeres y niños.
En la capital yemení, Saná, los distritos de Al-Nahdain y Al-Sabain han sido blanco de la agresión estadounidense que ha causado la muerte de tres personas.
Además, cuatro ataques aéreos estadounidenses han impactado la zona de Rajam, en el distrito de Bani Hashish, al este de Saná. Según un comunicado del Ministerio de Salud y Medio Ambiente de Yemen, este bombardeo ha dejado tres civiles muertos.
Washington ha intensificado esta semana sus ataques a Yemen. El martes, los cazas estadounidenses lanzaron tres ataques aéreos contra una granja en el distrito occidental de Anas de la ciudad de Dhamar, lo que provocó heridas a cuatro guardias y trabajadores agrícolas.
Esa jornada, los aviones de combate estadounidenses también atacaron la isla de Kamaran, cerca del puerto de Al-Hudayda en el mar Rojo.
El Ministerio de Relaciones Exteriores y Asuntos de los Migrantes de Yemen ha informado este miércoles en un comunicado que, desde mediados de marzo, los ataques estadounidenses han causado la muerte de 107 civiles y han dejado heridos a 223 más, en su mayoría mujeres y niños, lo cual constituye una violación flagrante de la soberanía yemení y de todas las normas, convenciones y leyes internacionales.
Estados Unidos está llevando a cabo ataques en Yemen como parte de su respuesta a las acciones de las Fuerzas Armadas del país árabe que, desde finales de 2023, han lanzado misiles y drones contra barcos comerciales y militares en el mar Rojo, en solidaridad con Palestina y en protesta por la guerra genocida de Israel en la Franja de Gaza.
A pesar de estos ataques, las Fuerzas Armadas de Yemen continúan sus operaciones de apoyo a la Resistencia y al pueblo palestino en la bloqueada Franja de Gaza, llevando a cabo ataques únicos que han alcanzado el corazón de los territorios ocupados, barcos vinculados al régimen sionista, e incluso buques de guerra estadounidenses en el mar Rojo y el océano Índico, además de derribar varios drones avanzados estadounidenses.
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